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miércoles, 22 de febrero de 2012

Mercedes-Benz Fashion Week

    Febrero es un mes muy esperado para el mundo de la moda, los diseñadores de todo el mundo nos adelantan las nuevas tendencias en las pasarelas de los diferentes desfiles, prolongando un poco la temporada de otoño-invierno.
    La primera en dar el pistoletazo de salida a las novedades ha sido Fashion Week Madrid estrenando pasarela y nombre -antes era Cibeles- patrocinado por Mercedes-Benz. Diseños más o menos iguales, colores monótonos... eso sí, de vez en cuando salta algún diseñador que te pone las pilas y dices... ufff. Modelos casi arquitectónicos, sencillos, jugando con gasas, y con colores amarillos, negros y grises. Los años veinte es lo que ha inspirado en las colecciones las  reinterpretaciones de la década, son tan variadas como los creadores que las ejecutan. Al fin de cuentas, lo que viene  es el estilo working girl transparente y los bolsos de pvc.

Vamos a comentar algunos diseñadores presentes en esta edición:

  Amaya Arzuaga, que trata los volúmenes como nadie. Vestidos delicados, tipo baby-doll con mucho volúmen pero sin resultar recargado. Fascinante colección, aunque ya se sabe que en esto de las colecciones,para gusto los colores.








Ana Locking, con sus prendas de cortes rectos nos traslada a los felices años 20 y el Crack de 1929 creando una silueta recta. La intención de esta diseñadora es trasladar al momento en que la Gran Depresión marcó la moda y demostrar que existe un paralelismo con el presente.





Andrés Sardá, consigue crear esa exquisitez y femineidad de lencería sexy con un puntito de locura, con sus espectaculares propuestas, transparencias, encajes, puntillas y  flecos como detalles más repetidos. Diseños sólo aptos para cardíacos. Transparentes bodys, bragas de cintura alta y el balconette push-up son piezas que se corresponden con diferentes épocas anteriores. Y es que las modas vuelven hasta en ropa íntima.



David Delfín, presencia absoluta del negro, vestidos  simétricos con cremalleras oro y cinturones, faldas topo de lana altísimas de talle y entubadas con blusas de cuello cisne y manga francesa.
 Comentar de este diseñador que la actriz Eva Hache al comienzo de la ceremonia de los premios Goya recientemente, lució un vestido negro que simulaba un esmoquin, diseñado por David  Delfín.



Miguel Palacio, mostrándonos  esa delicadeza en las prendas hace una apuesta clara por el tratamiento innovador de los tejidos y por una silueta muy femenina y urbana. Se aleja de los estereotipos creando un estilo sexy y sosegado al mismo tiempo.



Sita Murt, nos presentó prendas sencillas y cómodas  donde el punto ha sido el principal protagonista  tanto en vestidos, chaquetas o abrigos, destacando los tonos tierra, grises y azul marino. Pero el punto de color, lo ponían los tacones  flúor de los zapatos que lucían las modelos, que reinterpretaban las típicas Merceditas o bailarinas.




Francis Montesinos, a caballo entre la tradición y la innovación, Montesinos presentó prendas muy cómodas en las que el color estuvo muy presente y que, por cierto, viste al hombre de forma muy original, y a la mujer muy femenina.









 Ágata Ruiz de la Prada, coqueta y divertida  a ritmo de disco inferno apuesta para el día prendas de neopreno, punto y algodón con corazones y topos, típicos códigos de la marca.









Teresa Helbig, ganadora del Premio L’Oréal a la mejor colección de la temporada. La catalana nos mostró una propuesta inspirada en el jazz llena de audacia, mezclando vestidos flappers con botas cowboy y piezas de cuero.







   Roberto Verino, propuso un fondo de armario elegante,  de calidad muy funcional con cortes clásicos; gabardinas y complementos transparentes y plastificadas, cuya intención es provocar efectos velados.









Jesús del Pozo,  ésta vez sus mujeres han viajado hasta los desiertos más solitarios y, como nómadas, se han envuelto en capas y capas de gruesa lana combinadas con suaves gasas. Para la noche, suntuosos vestidos de sirena cubiertos de lentejuelas, originaron siluetas hermosas como las chaquetas quimono con hilos dorados.

Duyos,  lo suyo es un viaje en el tiempo. Nos trae las siluetas longilíneas de épocas pasadas bajo una lente particular. El fluir de la seda, gasas, plisados, y escotes a la espalda.
 



  Victorio&Lucchino, los sevillanos  quisieron reivindicar la costura y el buen hacer de este oficio de tijeras y de aguja con un desfile palaciego, sofisticado y lujoso, realzado con el uso de pieles para vestir bolsillos, cuellos y puños. Destacaron los abrigos que se muestran en diferentes versiones, desde los opacos realizados en terciopelos a los transparentes de encaje bordado, sin olvidar otros más aristocráticos realizados en telas adamascadas.